Conducido por el Bioquímico Alberto
Sebastián Parera,
siendo acompañado por los integrantes del Centro
de Investigación
para la Paz de la Facultad Regional Resistencia, Universidad
Tecnológica Nacional, Abogado Raúl Arce, Srta.
Anabela Orcota, Contadora Pública Nacional Marcela Beveraggi
y Magíster Miguel Armando Garrido.
Operador: Guillermo
Aguilar.
Tema:
Ciudadanía.
El tema Ciencia
y Tecnología para la Paz, ha sido tratado
siguiendo los lineamientos de la Enciclopedia de Paz y Conflictos
del Instituto de Paz y Conflictos de la Universidad de Granada,
dirigido por Mario López Martinez..
Ciudadanía, etimológicamente significa “pertenencia
a una ciudad” o “conjunto de individuos de una ciudad”.
El concepto de ciudadano ha tenido un largo proceso de evolución
aunque las fases primeras aún no hayan desaparecido
por completo.
El concepto más antiguo, que sigue existiendo en gran
parte de la Tierra es el de identificar a los ciudadanos con
el etnocentrismo y con un conjunto de derechos pertenecientes
sólo a la propia estirpe. En esta primera fase de ciudadanía
están excluidos de dichos derechos los extranjeros,
los refugiados, y los inmigrantes, simplemente por que son
de otra etnia, cultura o religión. Esta primera visión
surge cuando el ser humano aún no ha desarrollado la
percepción de la alteridad, confunde su identidad con
su territorio. El suelo natal o el violentamente conquistado
es la base de la construcción personal y cultural excluyendo
a los que no son de allí. Esta primera fase de ciudadanía
originada por el derecho al suelo se deriva en unos derechos
a su vez políticos y sociales que terminan en las fronteras,
y no son aplicables a los del más allá de las
fronteras, que generalmente eran el resultado de unos acontecimientos
violentos.
Con la filosofía de la ilustración y su puesta
en práctica por primera vez en Francia tras la Revolución
, el concepto de ciudadanía tuvo una evolución
progresiva y un gran cambio tendiente a la ampliación
y evitando todo tipo de discriminaciones. Se elaboró el
concepto de Estado tipificándolo e identificándolo
con un territorio dominado todo entero por un solo poder sin
tener en cuenta las etnias o religiones como en la primera fase.
Los nuevos ciudadanos son todos los que habitan en ese Estado
sin tener en cuenta ninguna de las limitaciones anteriores. Ya
no se identifica el concepto de “Nación” con
el “tennos” o “raza” sino que aparece
el concepto de “citoyen”. Ciudadano, para todo el
que está inscripto en ese Estado sin tener en cuenta su
procedencia. Esta evolución supuso una gran transformación
positiva y mucho más amplia que la anterior todos los
miembros del Estado son libres e iguales y tienen los mismos
derechos
En el pensamiento
actual y en las corrientes que buscan la Paz, como puede verse
en autores como Habermas y Heckmann, se busca
un nuevo estadio más acorde con la esencia de la humanidad
y con la unidad respecto a los valores y derechos. El nuevo concepto
de ciudadanía es universal. La Tierra es una “aldea
global” de la humanidad.. En la Carta de los Derechos Humanos
está el germen del concepto de ciudadanía universal
. La nueva ciudadanía tiende hacia una sociedad mundial.
Los derechos humanos tienen que transformarse en derechos y principios
de todos los hombres, vivan donde vivan.
La Educación para la Paz se basa en esta tercera fase
del concepto de ciudadanía.
La ciudadanía universal coincide en la actualidad con
los paradigmas económicos, éticos y la difusión
de valores, hábiles en todas las culturas. La intolerancia
de unos Estados con otros hoy no es real sino un pararrayos para
desviar la atención de los conflictos internos.
“¿QUE ES EL CONFLICTO? Deseos opuestos, requerimientos
opuestos, opiniones antagónicas: yo pienso esto y usted
piensa eso, mi prejuicio contra su prejuicio, mi guru es mejor
que el suyo, más profundamente aún, mi egocentrismo
contra su egocentrismo. Está, pues, este proceso contradictorio
que se desarrolla dentro de nosotros, el cual constituye la actitud
dualista hacia la vida: lo bueno y lo malo. ¿Alguna vez
se han preguntado si existe una relación entre lo bueno
y lo malo? ¿Es todo esto algo nuevo para ustedes? Hay
dualidad, ¿entienden?, odio y no odio.”
Jiddu Krishnamurti.
Sobre el Conflicto.