Conducido por el Bioquímico
Alberto Parera, siendo acompañado
por los integrantes del Centro de Investigación para la
Paz de la Facultad Regional Resistencia, de la Universidad Tecnológica
Nacional, la Odontóloga Emmy Arduña, Abogado Raúl
Arce , Comisario Inspector José Luis Aranda, Contadora
Pública Nacional Marcela Beveraggi, Prof. Luis Fabian
Gimenez y el Director del Centro de Inv. para la Paz Magister
Miguel Armando Garrido.
Operador: Guillermo
Aguilar.
Invitada: Directora de Cultura, Prensa y Difusión de
la Facultad Regional Resistencia, Universidad Tecnológica
Nacional, Argentina, Prof. Patricia Salmón.
Los Temas abordados han sido: Calidad
de Vida y Traducción
del libro “El Valor del Silencio. Un medio para la Paz”,
a la lengua Portuguesa.
En lo atinente
al tema “Calidad de Vida”, ha sido
tratado desde la óptica de la Enciclopedia de Paz y Conflicto
dirigida por Mario López Martinez, del Instituto de Paz
y Conflicto de la Universidad de Granada –España-
La cuestión de las definiciones relacionadas con el bienestar
humano es hoy todavía muy confuso y polémico, ya
que puede ser englobado en los siguientes conceptos: nivel de
vida, estilo de vida, modo de vida, calidad de vida, bienestar,
desarrollo, etc.
Todos estos conceptos tratan de concretar y delimitar el bienestar
del ser humano –núcleo esencial de cualquier proyecto
humanista de desarrollo- que tiene una doble dimensión:
cuantitativa y cualitativa: a) La cuantitativa evalúa
el nivel de vida alcanzado por su comportamiento material, la
estructura de bienes y servicios de una nación o un territorio
determinado, y b) La cualitativa, no menos importantes, las injustas
diferencias sociales heredadas del pasado y aún no atenuadas
ni controladas para la mayoría de los habitantes del planeta,
además, tiene en cuenta la equidad, es decir, el acceso
al bienestar material y espiritual de los diferentes grupos y
clases sociales.
En la Conferencia de Población y Desarrollo celebrada
en El Cairo en 1994, muestra una clara preocupación por
ella en términos de desarrollo humano y señala
abiertamente que las políticas de población deben
formar parte de otras más amplias. Ya desde 1954 las Naciones
Unidas y sus órganos especializados progresan en el debate
conceptual y metodológico sobre la definición y
la medición del bienestar del hombre con el objetivo de
encontrar un indicador sintético único. En esta
dirección han sido muy importante los siguientes indicadores:
a) El Producto Interior Bruto (PIB) de la Renta per Cápita.
b) El índice de calidad física de la vida (ICFV).
c) El Indice de Desarrollo Humano (IDH), es un indicador con
más elaboración matemática, que incluye:
la Esperanza de Vida (EV), la Tasa de Alfabetización de
Adultos y Producto Interno Bruto (PIB) per cápita ajustado
el poder adquisitivo real.
Cuando se intenta calcular el desarrollo humano o Indice de Desarrollo
Humano (IDH), se suele medir el logro general de un país
respecto a 4 dimensiones básicas de desarrollo humano:
la longevidad, los conocimientos, un nivel de vida decente y
la participación o exclusión.
Cuantitativamente se intenta hoy medir la calidad de vida a través
de la IDH. Esta categoría, calidad de vida, se entiende
como un logro de toda sociedad, y no como algo que tienen los
seres humanos de forma particular. El bienestar del ser humano
es un objetivo secular de la humanidad y el fin más elevado
del progreso histórico.
En lo atinente
a la Traducción del libro “El Valor
del Silencio. Un Medio para la Paz”, del Castellano al
Portugüés, por la Prof. Patricia Salmón, tiene
un significado muy especial para el Centro de Investigación
para la Paz de la Facultad Regional Resistencia Universidad Tecnológica
Nacional, porque permite trasmitir un Modelo de Mediación
a un país hermano como es Brasil y complementarnos (Argentina
y Brasil), desde el respeto a su propia identidad lingüística.
Próximamente en esta página se podrá acceder
a dicho libro. Todas nuestras felicitaciones y nuestro agradecimiento
a una mujer que con su aporte solidario y gratuito construye
la Paz, para ver un Futuro mejor, para nosotros y para nuestra
posteridad. Gracias. Patricia.
“Cómo mirar la vida de una manera no fragmentaria?
Cuando miramos la totalidad de la vida –no como un hindú,
un musulmán, un católico, un comunista, un socialista,
un profesor o un hombre religioso-, cuando veamos el movimiento
extraordinario de la vida, el cual lo incluye todo: muerte, dolor,
desdicha, confusión, absoluta falta de amor y la imagen
del placer que nosotros mismos hemos engendrado durante siglos
y que dicta nuestros valores y nuestras actividades, cuando veamos
totalmente esta vastedad, entonces nuestra respuesta a ello será por
completo diferente. Esta respuesta que surge cuando vemos en
su totalidad el movimiento íntegro de la vida, es la que
va a originar una revolución dentro de nosotros, y esta
revolución es absolutamente necesaria.
Krishnamurti –Sobre
el Conflicto-